Hace aproximadamente 30 años, se ha desatado una guerra silenciosa. La cual comenzó a principio de los años 80. En un comienzo era un proyecto para crear un programa que fuera capaz de poder autorreproducirse enfocado a la inteligencia artificial, imitando el comportamiento de los virus biológicos. Al corto tiempo los programadores empezaron a programar con el fin de una humorada para ganar prestigio personal en el medio. A estos programas los denominaban virus informáticos. Al pasar de los años y con el crecimiento exponencial de la gran telaraña la cual comenzó en agosto de 1991 o más conocida como w.w.w. (World Wide Web) Acompañado con el crecimiento directamente proporcional de las redes sociales (facebook, flickr, Yahoo, Messenger) entre otros. La evolución de la Web 1.0, a Web 2.0. Ayudo para que hoy solamente en la red hayan un promedio de 15.000.000 de programas con código malicioso.

En  general los usuarios no tienen conocimiento que son los virus informáticos o su comportamiento El primer paradigma lo podemos encontrar en que los virus informáticos o técnicamente correcto mencionarlos como malware (código malicioso) dado que los virus corresponde a una rama del malware,  La información relacionada con su comportamiento y evolución no tiene relación con el tiempo, dado los virus informáticos, como concepto, es  más  antiguo  que  los primeros sistemas operativos.

 Pero la información que se puede encontrar es escasa o nula.  No se puede negar que la etimología permanece en el tiempo, pero no su comportamiento, dado que el malware evoluciona de una forma potencial a medida que evolucionan las tecnologías.

En concreto, los daños que causa afectan no solo a un usuario común (casa Home) también a la empresas (Business) no importando su tamaño, los daños causados pueden afectar los procesos productivos los cuales se pueden cuantificar en una perdida de H.H (hora hombre) perdida de información vital para el normal funcionamiento de la empresa  o incluso la perdida de nuestros activos informáticos , por ende, el daño causado por la infiltración en la red afecta directamente a la empresa  con perdida económica e indirectamente a la economía de un país por la baja en la producción de esta.